Es imposible hablar de la gastronomía de la isla sin mencionar los tesoros del océano.
Las ostras de la isla de Ré, famosas por su sabor delicado y yodado, son imprescindibles. Criadas con esmero en los viveros de la isla, se pueden degustar solas, con un chorrito de limón o una salsa de chalota.
Otro de los productos estrella de la región, elaborado según métodos tradicionales, es la sal marina de la isla de Ré. Este «oro blanco», y en particular la flor de sal, obtuvo su IGP en 2023.
La salicornia, planta herbácea halófila que se encuentra en las marismas de la región de Ré, es también uno de los productos de las marismas. Considerada el «pepinillo» del mar, es el ingrediente ideal para una original receta de hamburguesa, por ejemplo.
La patata DOP contribuye a la reputación gastronómica de la isla. Recogidas a mano en primavera, estas patatas se distinguen por su piel fina y su carne fundente. Son perfectas asadas al horno, en ensaladas o como acompañamiento de pescados a la parrilla.
En cuanto a los viñedos, la isla produce vinos DOC de gran calidad, en particular blancos y rosados ligeros y afrutados. Una visita a una de las bodegas locales le revelará los secretos de la viticultura de la isla y le permitirá degustar algunas añadas únicas, a menudo acompañadas de productos locales para una experiencia completa. Los amantes del coñac y el pineau también encontrarán algo a su gusto.